Desde Covegan nos queremos unir al concepto impulsado por la OMS y la OIE «Un mundo, una salud», que subraya el vínculo existente entre las enfermedades animales y la salud pública.
Se trata de sensibilizar a la población acerca de las enfermedades infecciosas, para lograr que los especialistas en sanidad animal y humana colaboren estrechamente y así evitar posibles brotes
La vacunación de los perros es la mejor estrategia para prevenir la rabia en el ser humano y aunque España es un territorio libre de la enfermedad desde 1978 no debemos bajar la guardia, el ser un lugar de paso y estar cerca de países donde la rabia no está erradicada nos hace vulnerables.
La rabia, encefalomielitis aguda e incurable, es una enfermedad zoonótica provocada por el virus del género Lyssavirus que produce anualmente la muerte de más de 55000 personas en todo el mundo.
El principal vector de la rabia es el perro, provocando el 99% de los casos de transmisión en el ser humano, por lo que para prevenir los casos mortales en el hombre, la prioridad ha de ser la lucha frente a la enfermedad en los perros.
Aunque la península ibérica es un territorio libre de rabia desde 1978 y se habían dado casos únicamente de forma esporádica en perros en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, debido a la permeabilidad que existe en sus fronteras con el reino de Marruecos, donde la enfermedad sigue presente..
En el año 2013 se produjo un caso de rabia en España de un perro que había estado un periodo de cuatro meses en Marruecos, de igual forma en el año 2004 se confirmaron varios casos de rabia en perros procedentes de Marruecos que han desarrollado la enfermedad al llegar a Francia después de pasar por la península.
La cercanía del Norte de África, donde la enfermedad es endémica, el aumento de los movimientos de personas y animales entre los dos continentes y la libre circulación de personas y mercancías entre los países de la UE permite con facilidad la entrada de animales, habiéndose constatado un aumento del tráfico ilegal de mascotas provenientes de los países del Este de Europa, donde se describen casos de rabia en animales domésticos (principalmente perros y gatos).
La eliminación de la enfermedad como zoonosis, depende de su control y erradicación en los mamíferos implicados en su ciclo de transmisión. En este sentido, ninguna medida ha ayudado tanto a reducir la incidencia de la rabia en el hombre como la vacunación masiva de perros domésticos. Se ha demostrado que la vacunación del 70-80% de los perros de una población determinada, bloquea la ocurrencia de epidemias de rabia, siendo estas las cifras de inmunización recomendadas los la OMS.
En la actualidad el 40% de las familias españolas tienen mascotas y protegiéndolas a ellas evitamos la transmisión de la enfermedad.